
"Una vez encontré un genio que me concedió un deseo, sólo uno. Cuando me acerqué y le susurré mi deseo al oído, el genio se enfadó muchísimo. "No pienses que voy a malgastar un deseo en una tontería como esa" y desapareció en una nube de polvo que hizo que mis ojos picaran"
Me gusta contar esta historia porque cada persona imaginará un deseo diferente. Quizá alguien haya imaginado el verdadero.
1 comentario
nadie -
-Yo también.