El regreso.
Es curioso cómo me sorprendo a mí misma regalando un pensamiento a rostros y voces que no conozco. Dedicándoles una sonrisa que nadie puede ver.
Porque ayer, mientras me escondía en las sombras, sintiendo el frío de una noche que amenazaba con ser invernal, una vieja amiga vino a saludarme.
Y me dijo:
- Óyeme, ya no estoy vacía, tengo un alma, soy. Vosotros lo habéis logrado.
Y mientras yo escuchaba esas palabras en forma de sordo rodar, sonreí repasando nombres que no han sido impuestos y susurré: "La lata...."
7 comentarios
O.C.P. -
la sombrilla insolada -
En realidad pretendía hablar de una bolsa de plástico. Pero eso, al fín y al cabo, es lo de menos.
O.C.P. -
Periko -
Lo de la lata lo comprendo, pero no logro descifrar de qué hablas en el post siguiente... una pasa? perdoname, a veces ni cambiando esa foto con todos los colores posibles ni con mi cabeza... soy capaz de entender alguna cosa.
Deyector -
el hombre de plástico -
nadie -